Si por estos días los colombianos sentimos que
el país va para atrás, se esfuma nuestra esperanza, o al menos tenemos ganas de
decir que esto es una “republiqueta” por el ataque despiadado del actual
gobierno y el partido que lo respalda a la incipiente paz, deberíamos mirar e
inspirarnos en la adolescente sueca Greta Thunberg que se ha convertido en
pocos meses en una líder mundial en su lucha por el cambio climático.
Greta y su familia |
Hija de Svante Thunberg y Malena Ernman, una
cantante de ópera sueca, Greta, con una sensibilidad propia de los grandes
líderes, después de ver unos vídeos en su colegio sobre el cambio climático que
la impactaron hasta llevarla a la depresión a los 11 años, tomó conciencia de
este fenómeno y empezó su lucha con pequeñas acciones para detener esta
catástrofe. Y siguiendo este camino, el 20 de agosto de 2018, a sus 15 años, emprendió
su protesta frente al parlamento sueco, que en sus inicios se prolongó durante
3 semanas, con el fin de que su país diera cumplimiento al Acuerdo de París.
Al principio fue un reclamo en solitario pero su
decisión de continuar la huelga todos los viernes y a medida que se conocía en
todo el mundo esta se fue extendiendo a otros jóvenes través de las redes
sociales y en las calles de un sinnúmero de ciudades europeas y australianas,
en lo que hoy se conoce como "Viernes para el futuro" o
#FridaysForFuture, que este 15 de marzo completarán su semana 30.
De manera simultánea y ante el despliegue de la
huelga y de las marchas inspiradas en ella, Greta fue invitada en noviembre de
2018 por el TEDTalk a dar su charla, asombrando a todos aquellos que escucharon
y escuchan su maravilloso discurso que ya alcanza el millón de reproducciones.
El impacto suyo fue tan grande que fue
invitada a la Cumbre del Clima COP24 de Naciones Unidas celebrada en Katowice
(Polonia) en diciembre de 2018, donde se puede decir que conmocionó a todos
quienes la oyeron y vieron. La claridad y contundencia de su discurso con el
fin de concientizar a los gobiernos para luchar contra el cambio climático, el
tono suave de su voz de adolescente y su menuda figura enmarcada dentro de un
par de largas trenzas, no pudieron ser más impactantes. Ese fue tal vez el
momento en que muchos interesados en el tema en diversas latitudes la
descubrimos y empezamos a seguirla.
En enero pasado fue invitada al World Economic
Forum en Davos y hace unas semanas a Bruselas donde intervino ante el Comité Económico
y Social de la Unión Europea. Su impacto ha sido tan grande que el pasado 7 de
marzo fue destacada como la mujer del año en Suecia y ayer 13 de marzo fue
candidatiza para el premio Nobel de Paz.
Al mismo tiempo como la huelga y las marchas se
han extendido por numerosas ciudades del mundo, Greta asiste a muchas de ellas -a
las que viaja en tren debido a las altas emisiones de CO2 de los aviones- donde
miles de estudiantes, activistas de todas las edades y ciudadanos comunes la
acompañan en su lucha.
Para mañana viernes 15 de marzo ha convocado una
huelga escolar mundial en la que ya están inscritas 1325 ciudades y 98 países
(se espera que superen los 100), incluido
Colombia, según se encuentra en el registro de la misma.
Frente a las horas aciagas de Colombia y
nuestra lucha por defender la paz, no está de más tener como referente a Greta
Thumber, y emularla en sus acciones protestando con contundencia, exigiendo
nuestro derecho a terminar la guerra, a la verdad, a la reparación integral de
las víctimas y cerrar el capítulo de odios y venganza, salir a las calles,
marchar, protestar, protestar y protestar, y demostrarles a quienes nos quieren
devolver al pasado en cada manifestación virtual o presencial que tal como dijo
Greta en Polonia, estamos aquí “para
hacerles saber que el cambio está llegando, les guste o no” y que “el verdadero
poder pertenece a la gente”
Margarita Obregón